Rafael Calama1, Javier Gordo2, Rubén Manso3, Marta Pardos4
Estudiar la regeneración natural de una especie determinada constituye uno de los retos más apasionantes y complejos a los que nos podemos enfrentar los investigadores forestales, pero también uno de los que requieren más paciencia, ilusión y continuidad en la financiación, dado los largos periodos de estudio que se requieren. Corría el año 2003 cuando el INIA y el Servicio Forestal de Valladolid iniciamos una línea de investigación para estudiar la regeneración del pino piñonero (Pinus pinea). Esta línea pretendía responder a dos preguntas fundamentales: (1) ¿Por qué en amplias zonas de los arenales del interior de la Meseta, óptimas para la presencia del piñonero, la regeneración natural no se produce? (2) ¿Cuál debe ser el esquema de cortas adecuado para conseguir esta regeneración?