Los eucaliptos, árboles útiles y saludables para humanos y animales

Por Juan Andrés Oria de Rueda Salgueiro. Profesor de Botánica, Micología aplicada y Conservación de Flora Protegida. Universidad de Valladolid 

Los eucaliptos están en el candelero y no es para menos, pues poseen un alto valor ecológico, ambiental, saludable y socioeconómico, que sobrepasa, y con mucho, a sus pretendidos efectos nocivos. La mayor parte de las personas aprecian al eucalipto como medicinal, por sus potentes efectos curativos de las vías respiratorias frente a catarros y afecciones pulmonares de garganta. Pero veremos que esta utilidad es múltiple y diversa.

El género Eucalyptus incluye unas 800 especies distintas de árboles pertenecientes a la familia de las mirtáceas y cuyo origen se concentra en Australia y su entorno. Todas son de hojas perennes y muy aromáticas, especialmente las juveniles, más redondeadas que las adultas.

Escalando un eucalipto para anillar los pollos de azor de un nido. Obsérvese la cantidad de robles que nacen bajo los eucaliptos. Foto Salvador Rebollo

El eucalipto es uno de los árboles de mayor tamaño. De rápido crecimiento,  alcanza un gran desarrollo en altura: es muy frecuente que alcancen los 37 m de altura y que sean los árboles más altos de una región, como pasa en muy diversas comarcas de España, desde Murcia, y Andalucía hasta Galicia y Cantabria. De hecho, los árboles más altos de España son los eucaliptos blancos del Souto da Retorta en Chavín, Lugo, muy cerca de Viveiro, algunos con con más de 68 m de altura y 7,55 m de circunferencia. En Portugal, cerca de Coimbra (Valle de Canas) crece un espectacular eucalipto de 73 m de altura, distinguido como árbol europeo más alto. Bajo estos árboles sorprende la cantidad de robles, fresnos y otras especies que crecen y se desarrollan.

Los eucaliptos y su sombra, como este del Parque del Retiro de Madrid son motivo de aprecio para muchas personas. Foto propia.

La utilidad más común de interés social es el empleo de su celulosa para fabricar el papel tisú (el usado para papel higiénico, papel de cocina, servilletas, pañuelos de papel, etc) de propiedades absorbentes y de suavidad insuperables. También se fabrica papel de impresión de máxima calidad. La esencia del eucalipto es famosa por sus propiedades desinfectantes antivíricas (inhiben la multiplicación de los virus) y antibacterianas, valiosas frente a numerosas enfermedades respiratorias (bronquitis, neumonía, etc) y afecciones de garganta, utilizada en farmacia en multitud de productos. También se presenta en cremas y ungüentos destinados a aliviar dolores musculares y articulares. Sus beneficios parten del alto nivel de eucaliptol o cineol, que promueve la función respiratoria normal, es antiinflamatorio y ayuda a reducir las inflamaciones y dolores de padecimientos como lumbago, ciática, reúma, entre otros. El empleo del eucaliptol en aromaterapia hace que posea incluso un gran valor saludable el simple paseo cerca de estas olorosas mirtáceas. Por todo ello se realizan plantaciones para la producción sostenida de estos importantes recursos. Su aprovechamiento controlado en España resulta primordial, pues si se produce de modo racional, como producto de cercanía, se pueden potenciar sus aspectos positivos antes de importar el papel de lejanos países, donde no hay control y certificación ecológica de sus plantaciones, como la cuenca amazónica de Brasil, Indonesia o África.

Desde el punto de vista ecológico las plantaciones de eucaliptos son capaces de fijar grandes cantidades de carbono y mitigar de forma destacada el exceso de gases de invernadero y el cambio climático, respecto a otros cultivos agroforestales, a la vez que no requieren productos químicos tóxicos, como sí son los empleados en agricultura para maíz, patatas, remolachas, etc que se sembraban en los mismos terrenos donde ahora crecen las mirtáceas. Poseen además una gran atracción para la fauna. Por ejemplo, las amenazadas águilas imperiales ibéricas y las águilas de Bonelli o perdiceras buscan los altos eucaliptos para instalar sus nidos en muchas zonas del centro y sur de España y Portugal, así como otras muchas aves, como los azores en Galicia. De hecho las únicas poblaciones de águila perdicera en progresión en Europa son las que nidifican en eucaliptos extinguiéndose las de los roquedos. En otros continentes donde se han plantado eucaliptos son muy buscados por otras rapaces, como las imponentes  águilas coronadas en África o las grandes y emblemáticas águilas calvas en California. Multitud de aves de muchas especies llevan al nido ramas con hojas de eucalipto por su valor contra los parásitos, pues ahuyentan a insectos y ácaros que afligen y matan a los pollos. Estas propiedades son útiles como plaguicidas ecológicos en la industria.

En la mitad sur de España, como también en Argentina y Uruguay hace unos 80-100 años se plantaron y cuidaron miles de eucaliptos aislados para refugio del ganado pero también de las personas como trabajadores del campo que hablaban muy bien de este árbol como lugar de pocos insectos, tábanos y garrapatas. Pues en las campiñas de inmensos olivares y viñedos andaluzas, extremeñas y de Castilla la Mancha te encuentras que muchas parejas de águila imperial nidifican sobre estos grandes árboles. Resulta que los predadores de los huevos y pollos, como son las ginetas y últimamente los mapaches depredan muy fácilmente los nidos de las águilas instalados en árboles de corteza agrietada, como alcornoques, encinas y chopos, algo que no ocurre en absoluto con los eucaliptos, debido a su corteza lisa y sin grietas, infranqueable para estos carnívoros. En otros continentes impiden el acceso a los monos por ese mismo motivo. El resultado es que las águilas de todo tipo, milanos reales, azores, etc, prefieren los eucaliptos para nidificar. De igual manera hay animales como los picamaderos negros (pájaros carpinteros escasos) que nidifican en eucaliptos de la cornisa cantábrica al resultar de muy difícil acceso a las martas, cada vez más frecuentes.

Nido de águila de Bonelli (Hieraetus fasciatus) en eucalipto. Foto Andreia Dias.

Portada de la Tesis doctoral de Andreia Dias (2020) en donde explica la sorprendente y exitosa población de águilas perdiceras o de Bonelli en los eucaliptares lusos.

Las abejas, abejorros y numerosas especies de mariposas acuden durante todo el año a las aromáticas flores de los eucaliptos, elaborando una exquisita miel apreciada también como medicinal. A su vez, este árbol hace que  por el efecto acaricida del cineol disminuya de modo notable la peste de la varroa, ácaro mortífero para las abejas españolas y otros muchos insectos.

Unos de los olvidados productos de los eucaliptares son los hongos comestibles muy apreciados. Muchos de ellos son los que se asocian con estos árboles formando micorrizas. Es el caso de diversos rebozuelos (Cantharellus cibarius y Craterellus tubaeformis) y lenguas de vaca (Hydnum repandum) abundantísimos en la cornisa Cantábrica en pleno invierno. En los eucaliptos de la mitad sur de Portugal y en Huelva proliferan los buscadísimos gurumelos (Amanita ponderosa). Algunas de estas especies hacen a los árboles extremadamente resistentes a las terribles sequías. Otros muchos hongos medicinales y comestibles crecen en los tocones y troncos, como el pollo de monte (Laetiporus sulphureus), cola de pavo (Coriolus versicolor), etc.

Una de las aplicaciones de mayor aprecio de los eucaliptos es el uso de sus plantaciones para limpiar y filtrar las aguas residuales, actuando como verdaderas depuradoras vivas y mejorar el medio ambiente, de indicación especial para los países pobres. Los eucaliptos son capaces, en colaboración con hongos de diversos tipos de micorrizas y bacterias asociadas de depurar prodigiosamente las aguas contaminadas, neutralizando y quebrando  las moléculas de sustancias tóxicas, donde representan un peligro para la salud humana y el medio ambiente. Hay que tener en cuenta que, según las Naciones Unidas, un asombroso 80 a 90 por ciento de todas las aguas residuales generadas en los países en desarrollo se vierten directamente en cuerpos de agua superficiales.

Hace varios años, con motivo de haber enfermado de neumonía, comprobé los fantásticos efectos de las plantaciones de eucaliptos sobre la salud. La polémica del uso del eucalipto acusándolo de exótico y sus pretendidos efectos perversos sobre la naturaleza no debe hacer olvidar la enorme cantidad de virtudes y de ventajas de estos benéficos e imprescindibles árboles. Necesitamos a los eucaliptos, sus productos y virtudes en bien de nuestra sociedad y naturaleza, siempre bien gestionados, claro está.

Bibliografía

Dias  Ribeiro, A. (2020). The expanding tree nesting Bonelli´s eagle (Aquila fasciata) population of southern Portugal. Tesis doctoral. Barcelona.

 García Salgado, G.J. (2017). Ecología trófica y selección de hábitat de nidificación del azor (Accipiter gentilis) en plantaciones de eucaliptos del noroeste de España. Tesis doctoral. Universidad de Alcalá de Henares. Salvador Rebollo de la Torre (dir. tes.) , Pérez Camacho, L. (codir. tes.)

Mieres-Castro,D.,  Ahmar, S., Shabbir,R., Mora-Poblete, F. (2021). Antiviral Activities of Eucalyptus Essential Oils: Their Effectiveness as Therapeutic Targets against Human Viruses. Pharmaceuticals. 14(12): 1210.

Ruiz de la Torre, J. (2006). Flora Mayor. Organismo Autónomo Parques nacionales. Ministerio de Medio Ambiente. Madrid. 1760 pp.

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