Por Jorge Parra López, Ingeniero de Montes (*).
La profesión de Ingeniero de Montes tiene casi 175 años de antigüedad, ya que en 1848, el 2 de enero, comienzan las enseñanzas en la primera Escuela de Ingenieros de Montes.
Dicha profesión, desde sus inicios, siempre ha estado vinculada a la ordenación y conservación de las masas forestales y en las últimas décadas a la extinción de Incendios Forestales. En este sentido, con la consolidación del cambio climático, la ausencia de una gestión forestal adecuada por parte de las distintas administraciones implicadas (Canarias aún no dispone de un Ley propia) y una desordenación del territorio, acentuada en los últimos años, debido a la inacción nuevamente de las distintas administraciones estatales, autonómicas y locales, ha provocado que los incendios forestales se hayan convertido en una emergencia de Protección Civil.
Es por ello que los ingenieros de monte que trabajamos en la extinción, nos hemos ido vinculando poco a poca al sector de las emergencias y las catástrofes y hemos optado, en mi caso, por formarnos en el la coordinación y dirección de emergencias de Protección Civil, aplicando los distintos conceptos de la defesan contra los incendios forestales y complementándolos con los fundamentos de la Protección Civil, gracias a ello hemos estado al frente de las últimas grandes emergencias que han ocurrido en Canarias: Volcán de La Palma y Tormenta Tropical Hermine. Se pone de manifiesto por lo tanto que la profesión de Ingeniero de Montes vinculada a la protección civil en el sector público es transversal y fundamental para la gestión de Grandes Emergencias ya que aglutina los conceptos fundamentales de la defensa contra los incendios forestales y la protección de la vida y los bienes de las personas.
Durante la emergencia volcánica en la Isla de La Palma asumí en un primer momento la Dirección Técnica al estar en ese momento como Técnico de Guardia de la Dirección General de Seguridad y Emergencias y posteriormente ejercí como Jefe de Operaciones de los distintos grupos de intervención que actuaron, teniendo que coordinar a medios del estado, de la comunidad autónoma, de los todos cabildos y de los ayuntamientos, siendo la primera vez que se hacía Dicha experiencia fue muy positiva y estresante en algunas ocasiones puesto que una emergencia como la volcánica engloba la vertiente natural, al ser un espectáculo de la naturaleza y la catastrófica puesto que muchas personas lo perdieron todo.
(*) Jorge Parra López, Ingeniero de Montes, Ingeniero Técnico Agrícola y Máster en Protección Civil y Gestión de Emergencias, pertenece al Servicio de Protección Civil y Atención de Emergencias de la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias desde el año 2012 si bien trabaja en el Gobierno de Canarias desde el año 2006. Desde el inicio de su carrera profesional se ha especializado en planificación ambiental, territorial y de protección civil. En el ámbito de la protección civil se ha especializado en riesgos naturales, tecnológicos y antrópicos. Ha sido Director Técnico de Emergencias en grandes incendios forestales, fenómenos meteorológicos adversos, inundaciones costeras, episodios de contaminación marina, colapso de estructuras, crisis sismo volcánicas de la isla de El Hierro y recientemente, en la emergencia volcánica de la isla de La Palma en la que estuvo como Director Técnico inicialmente y luego como Jefe de Operaciones. La última emergencia en la que ha trabajado ha sido la Tormenta Tropical Herminie.