Destrucción del emblemas forestales en Jaén

El emblema de las profesiones forestales, creado en 1857 para los ingenieros de montes y posteriormente adoptado por los ingenieros técnicos y la guardería forestal, está presente en muchas de las obras que este colectivo ha realizado en España, así como en innumerables publicaciones, casas, refugios y señalizaciones. Igual ocurre con el de otras ingenierías, que rematan sus obras con los respectivos escudos.  Por eso ha causado asombro y malestar la destrucción en Jaén de dos de estos escudos, que se habían instalado en dos puertas de acceso a montes públicos como colofón a la ejecución de obras de mejora de caminos forestales entre los años 2010 y 2015.

Lo denunciaban el pasado 15 de marzo varios colegiados de Jaén, que dirigían un escrito al consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. “En Jaén, que es la provincia más significativa de Andalucía desde el punto de vista forestal, nuestro delegado territorial ha decidido condenar mediante decreto verbal a que la misma empresa pública que los puso (TRAGSA) haga desaparecer esos dos escudos de los montes públicos. En uno de ellos, por deferencia de los operarios encargados, la placa sustentadora del escudo se ha desmontado íntegramente, pero en el otro no ha quedado más remedio que actuar con su demolición en pedazos, ya que se había elaborado mediante un hermoso tallado sobre la propia roca de su marco”, escribían.

Una decisión que ha causado “indignación e impotencia”, aseguraban en su escrito, entre otras porque la obra había sido recepcionada de forma favorable y sin que se hubiese manifestado ningún reparo al respecto.   Paradójicamente, alegan, “es habitual en los montes públicos la proliferación de una amplia multiplicidad de otros símbolos, como señales, carteles, dibujos y toda una gama de indicaciones gráficas que son de la más diversa y dudosa procedencia, pero cuya permanencia por un tiempo sin definir casi nunca se pone en tela de juicio”.

Ante estos hechos, el pasado 28 de marzo, el Colegio Oficial de Ingenieros de Montes envió una carta, firmada por el decano presidente, Eduardo Rojas Briales, al consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, en el que consideraba la eliminación de esos emblemas “una actuación impropia y lamentable contra un símbolo vigente legalmente y aceptado en toda España como una representación de la vocación forestal y de la defensa de la naturaleza, además de un agravio con otras obras públicas dirigidas por otros cuerpos de ingenieros donde se respetan los correspondiente símbolos”. Por ello se solicitaba “la reposición de los emblemas forestales eliminados y que se den las correspondientes instrucciones para que no se repita en el futuro”.

A esta petición se acompañaba un artículo del académico de número de la Real Academia de Ingeniería, Manuel y Silva y el doctor ingeniero de Montes Ignacio Pérez-Soba, en el que se explica la importancia histórica y simbólica del emblema forestal español. Entre otras cosas, este artículo, publicado en el número 68 de la revista “Montes” (2002), aclara que los elementos que conforman los escudos de las distintas ingenierías hacen referencia a las herramientas más emblemáticas de cada profesión y nada tienen que adscripciones políticas.

Descrito por primera en la Real Orden de 11 de septiembre de 1847, el emblema forestal está constituido por dos herramientas bifrontes, un marco real y zapapico, cruzados y enlazados, contorneados por dos ramas, una de encina y otra de laurel, atadas en la parte inferior y abiertas en la superior, timbrado todo de una corona real colocada al aire. Reflejan tanto la idea de que la conservación de la naturaleza pasa por su gestión sostenible, como el necesario equilibrio entre la técnica y las ciencias naturales en la ingeniería de Montes y la variedad y multiplicidad de los problemas y actuaciones a los que se han de enfrentar los gestores forestales. Su orla vegetal de encina y laurel alude a la solidez, la resistencia, la fortaleza, así como la honra y la virtud.

Pese a todo, el director general de Gestión del Medio Natural y Espacios Protegidos de la Junta, el ingeniero agrónomo Francisco Javier Madrid Rojo, desestima la petición del Colegio Oficial de Ingenieros de Montes, alegando que “la identidad de las obras que ejecutamos no puede depender de las titulaciones de las personas que las dirigen, máxime teniendo en cuenta que en esta Consejería son diferentes profesionales los que están al frente de nuestros proyectos, además de ingenieros de montes e ingenieros técnicos forestales, tales como arquitectos, arquitectos técnicos, ingenieros industriales, ingenieros de  caminos canales y puertos, agrónomos, biólogos, etc. De acuerdo a lo expuesto, consideramos que hemos actuado conforme a las normas a las que debemos ajustarnos, de manera que de haberse ejecutado la obra de acuerdo a las mismas no tendría que haberse procedido a la eliminación de ningún emblema. Cuestión esta que en ningún momento debe entenderse como una falta de respeto o de reconocimiento a tan insigne escudo, ni de su importancia histórica y simbólica, tal y como muestra el hecho de la existencia de múltiples representaciones del mismo en nuestros montes y edificaciones, que se utilizaron en obras ejecutadas con anterioridad, en su mayoría antes de la existencia de la propia Comunidad Autónoma”.

Imágenes de los emblemas destruidos: LOS ENGARBOS, LAS TORRECILLAS.